La alopecia androgenética (AGA) es la forma más común de pérdida de cabello afectando al 80% de los hombres y al 40% de las mujeres, y suele manifestarse de manera progresiva. En sus primeras etapas, puede pasar desapercibida, pero identificarla a tiempo es fundamental para iniciar un tratamiento adecuado y frenar su avance.
Esta condición tiene una base genética y hormonal, principalmente relacionada con la sensibilidad de los folículos pilosos a la dihidrotestosterona (DHT), una hormona que acorta el ciclo de crecimiento del cabello y provoca su miniaturización progresiva en la región frontal (entradas), coronilla (vertex) e incluso región parietal. Las zonas temporales y occipital están respetadas, dada la menor sensibilidad de los folículos pilosos de esas zonas a la acción de los andrógenos.
Clínicamente, la AGA progresa de manera diferente en hombres y mujeres, con diferentes escalas de clasificación. Si bien la causa puede ser similar en ambos sexos, la evidencia de los andrógenos es más fuerte en los hombres.
En los hombres, suele comenzar con una recesión de la línea frontal y pérdida en la coronilla que progresivamente confluyen en la zona parietal siendo el patrón más común denominado patrón mediterráneo, sin embargo, existen otro tipos de patrones como el patrón semita que la afectación predominante es en la región frontal con respecto a la coronilla y el patrón nórdico o anglosajón que se caracteriza por presentar perdida tanto en entradas, zona parietal y coronilla pero respetando un mechón frontal. Mientras que en las mujeres se presenta como un adelgazamiento difuso en la zona central del cuero cabelludo (región frontoparietal), muchas pacientes comienzan a percibirlo como un “ensanchamiento de la raya del pelo”
Entre los primeros signos de la alopecia androgenética se encuentra la disminución de la densidad capilar en ciertas áreas, mayor visibilidad del cuero cabelludo y la aparición de cabellos más finos y frágiles, todos estos signos suelen ser muy frecuentes dentro de los motivos de consultas, sin embargo, para realizar un diagnóstico correcto es necesario la valoración por parte del especialista con el tricoscopio que no es más que un dispositivo que nos permite observar el estado de los folículos pilosos y diferenciar esta afección de otras causas de caída capilar.
Afortunadamente, hoy en día contamos con múltiples opciones para tratar la alopecia androgenética y mejorar la calidad del cabello. Entre ellas:
- Minoxidil, es una de las más utilizadas, ya que actúa prolongando la fase de crecimiento del cabello y aumentando el grosor de los folículos.
- Finasteride y el Dutasterida, son fármacos antiandrógenos inhibidores de la 5-alfa reductasa, que reducen los niveles de DHT y ayudan a detener la miniaturización del cabello. Según evidencias científicas el Dutasterida tiene mayor efectividad y similar seguridad frente a Finasteride demostrada en los ensayos clínicos y meta-análisis, ya que esta inhibe la enzima 5 alfa reductasa tipo I y II, mientras que el Finasteride por su parte solo la tipo II.
- Espironolactona, utilizada especialmente en mujeres en edad fértil, es una excelente alternativa para aquellas pacientes que se asocian otros síntomas como seborrea, acné e hirsutismo.
- Microinyecciones, una de las mejores estrategias actuales es la administración de fármacos mediante microinyecciones intradérmicas, lo que permite mayor efectividad, al actuar directamente sobre los folículos potenciando los resultados de los tratamientos orales y tópicos, con una alta tasa de efectividad y menos efectos secundarios, al evitar la absorción sistémica.
- Terapias regenerativas, tanto el plasma rico en plaqueta (PRP) y exosomas han revolucionado el tratamiento de la alopecia. Plasma Rico en Plaquetas (PRP): obtenido de la propia sangre del paciente, estimula la vascularización del folículo, mejorando su calidad y favoreciendo el crecimiento capilar. Mientras que los exosomas siendo un tratamiento más novedoso también contienen factores de crecimiento que promueven la regeneración del folículo piloso.
- Toxina botulínica, tiene evidencia científica que también nos ayuda a mejorar la microcirculación del cuero cabelludo y reducir la tensión muscular que puede contribuir a la caída capilar.
- Láser de baja potencia (LLLT), todos estos tratamientos explicados anteriormente pueden verse beneficiados de manera complementaria con el láser de baja potencia, que dentro de sus beneficios incluye aumento de la circulación en el cuero cabelludo estimulando la actividad de los folículos pilosos. También reduce la inflamación y prolonga la fase de crecimiento del cabello.
- Suplementos naturales, pueden ser un gran aliado en el cuidado capilar. Ingredientes como la serenoa repens y la curcubita pepo tienen propiedades antiandrogénicas que pueden ayudar a reducir el impacto de la DHT en los folículos pilosos.
Aunque su causa principal es genética, existen factores externos que pueden acelerar su progresión, como el estrés, una mala alimentación o la falta de actividad física es por eso por lo que la mejoría de esta patología comprende no solo hacer de manera correcta el tratamiento que es de gran importancia sin dejar a un lado un estilo de vida saludable.
Para concluir la alopecia androgenética es una condición tratable si se detecta a tiempo y se maneja de manera adecuada. Con los tratamientos actuales y una serie de hábitos saludables, es posible frenar su avance y conservar un cabello más fuerte y saludable. Si notas signos de adelgazamiento capilar, es recomendable acudir a un especialista en tricología para evaluar tu caso y encontrar la mejor estrategia para mantener la salud de tu cabello.
Bibliografía
Grimalt R, Rocha N, Vañó-Galván S, Saceda-Corralo D, Alonso-Castro L, Jiménez-Cauhé J, et al. Recomendaciones sobre el manejo clínico de los pacientes con alopecia androgenética. Actas Dermosifiliogr. 2023. doi:10.1016/j.ad.2023.12.008
Lopes de Faria J, Sinclair R, Vañó-Galván S, Trüeb R, Pirmez R, Goren A, et al. Practical recommendations for the use of oral minoxidil in the management of hair disorders: A consensus statement from the International Journal of Trichology and the Hair Research Society of India. JAAD Int. 2023;13:78–83. doi:10.1016/j.jdin.2023.08.003
Shapiro J, Ho A, Sukhdeo K, Yin L, Lo Sicco K. Evaluation of platelet-rich plasma as a treatment for androgenetic alopecia: A randomized controlled trial. J Am Acad Dermatol. 2020;83(5):1298-1303. doi:10.1016/j.jaad.2020.07.006